Éste sería el genuino
y este otro el nuestro:
Cuando observamos los diferentes estratos de rocas con fósiles, somos capaces de visualizar la evolución de una especie, pudiendo concluir si ésta ( la evolución) fue lenta o rápida. Entendemos por rápida menos de 100.000 años.
Hace aproximadamente unos 65000000 de años que desapareció el último dinosaurio y tendemos a pensar que de ello poco sabemos,, sin embargo bastaría observar a un simple lagarto para entender como eran aquellos bichos.
Nos podríamos preguntar a qué hora comían?.
Un lagarto al igual que los pájaros poseen un anillo óseo llamado anillo escleral, ( una cualidad que los diferencia de los mamíferos). Aquellos que tienen una pequeña abertura en la mitad de ese anillo son de costumbres diurnas, los que tienen una mayor abertura son de costumbres nocturnas y aquellos de tamaño intermedio tienen costumbres tanto de día como de noche.
Ya tenemos una referencia,, ahora vamos a analizar el anillo escleral de los fósiles
Los grandes herbívoros salían a comer tanto de día como de noche (igual que hoy – abertura intermedia )
Los grandes reptiles voladores “ Pterosaurios” (que son los prototipos de las actuales aves) comen tanto de noche como de día – abertura intermedia)
El Velociraptor comen de noche. (mayor abertura)
Y el Tiranosaurio Rex ¿? Bueno aquí es aconsejable no equivocarse, ya que estamos hablando de un tipo con cara de pocos amigos, …. Pensemos que ese lagarto medía 18 metros de altura y 42 metros de largo con un peso de 6 toneladas, que ejercía al morder una fuerza de 5800 kg mucho más que un cocodrilo que está sobre 1200 kg. Además de unos 60 dientes en forma de cono. Unos afilados como hojillas y otros como sierras que trituraban los huesos .
Fijándonos en los lagartos comunes de hoy, podríamos decir que el tiranosaurio rex era de sangre fría, aunque no estoy seguro, ,, en caso de que fuese de sangre caliente, entonces un tiranosaurio que pese unas 6 toneladas necesitaría cada día ingerir unos 200000 calorías, es decir unos 150 kg de carne, en este supuesto estaríamos en su menú.
Dicho esto, nos ponemos en la opción optimista,,,,.
Digamos que al mediodía no era una buena hora para devorarnos, además, seguro que eran de sangre fría y que aunque corran a una velocidad de 65 km/h nosotros no nos acercaremos al lagarto,, es decir lo veremos con cuidado de lejos…en fín no hay que tener miedo.
Así que vámonos al parque outerra … será una divertida excursión.